Dibujar para combatir el aburrimiento. Sentirse un “bicho raro” en el secundario. Tener a “D`artagnan” y “El eternauta” entre las primeras lecturas… Vignolo, artista argentino, nos comparte aquí parte de su universo creativo y sus impresiones sobre el mundo del cómic y la ilustración.
Por Camila Reveco
Periodista cultural con especialidad en artes plásticas
¿Cómo es y qué dibuja la nueva generación de historietistas e ilustradores nacionales? El entrevistado en esta oportunidad, es uno de sus exponentes: Nicolás Viñolo, alias “Vignolo”, nació en la provincia de Mendoza, al oeste de Argentina, el 6 de marzo de 1988. El, junto a otros de su generación, representa a toda una nueva camada de “novelistas gráficos”, como también se los llama.
“La historieta es un medio como el cine o la literatura, puede abarcar un amplio espectro de historias o géneros, pero lamentablemente sigue relacionado al humor o a productos más infantiles como Mayor y Menor, el cuál no me parece malo, pero no es lo único que se está haciendo acá”, describe Vignolo acerca de la situación que atraviesa el género pero destaca que “en los últimos años la aparición de certámenes, convenciones y ferias han expuesto que el fenómeno puede crecer y que ya no se trata de un grupo de locos subterráneos”.
El joven mendocino forma parte de un mundo con una gramática que tiene una lógica de funcionamiento muy particular y rica, liderada por la imaginación. En la historieta hay mucha contundencia artística. Es un género que fluye y se redefine constantemente, y por sobre todo, que ha sabido permanecer a través del tiempo adaptándose a cada momento histórico.
Hoy, el rubro cuenta con nuevos autores talentosos; Vignolo es un ejemplo.